Benidorrr

Resumen del LCF:
Parece que a la tercera va la vencida y por fin el sitio de celebración estaba en condiciones. Tras un primer año en el inhóspito recinto de la Volvo y un segundo, en una especie de improvisado laberinto en el que para bajar tenías que subir primero y había un puto monopolio pizzeril que dejó a much@s más que desencantad@s... parece que este año han acertado de pleno. La ciudad deportiva era grande, así que los escenarios pudieron estar lo suficientemente separados, el suelo era césped blandito donde podías reposar las posaderas entre tanto ajetreo, comida variada y bebida a un precio bastante asequible. La única pega era el tema de basuras: no había contenedores disponibles (y, si la gente ya es guarra de normal, imagínate cansada y borrachilla).
El jueves empezó flojillo, con un escenario cerrado y unos lori meyers bastante descafeinados. La sorpresa del día: the pains of being pure at heart.
El viernes se incrementó notablemente la afluencia de gente. Atasco en la carretera y llegamos tarde. Nos perdimos a OH, LIBIA! (y qué a-livio!..jaja) y llegamos ya empezadas las flores azules. Con un Óscar afónico que olvidaba letras y metía gallos ahora sí y ahora también y una Helena que intentaba dejarse las lentejuelas de la camiseta en el escenario para salvar un poco la actuación. Aún así, debo reconocer que bailé como me salió de la bola y me lo acabé pasando bolinga (nueva acuñación)
Después vinieron los Vetusta. Con alguna concesión al primer álbum, pero centrándose en la redondez y savoir faire del segundo nos dejaron afónicos y con las orejas sobreestimuladas de tanto acusti-orgasmo.
Y aún quedaba la cabeza del cartel: MIKA. Pese a matarme sólo lo justo, estaba deseando verlo, porque sabía que la puesta en escena sería muy divertida y la fuerza que desprendería iba a arrasar... y no me equivocaba. El escenario Bud estuvo más lleno que en cualquier otro momento. El buen rollo que se gastaba se nos metió a tod@s por los poros y yo... con mi querida Grace Kelly eché alguna lagrimilla por algún que otro recuerdo que me trajo a la mente.
Y la noche acabó con Crystal Castles: luces roedoras y sonidos metálicos, contraídos, espamódicos... mmmm... un broche en forma de cantos de sirena que nos llevó donde quiso...
El sábado llegamos de empalme con ganas locas de ver a maga... y CHAS!... toma birria de concierto: mala sonorización y pésima elección de temas. Resultado: gente sentada y bostezando y escenario medio vacío... (con maga me siento como en una montaña rusa en la que sólo vamos cuesta abajo... y por lo que parece, sin frenos)
Sexy Sadie en su línea, sin excesos, pero redondos y trayendo a la memoria besos de adolescencia... aisss...
Mi gran sorpresa de la noche: mando diao (aunque a algun@s les parezca un crimen... no los había escuchado en mi vida)... suenan bastante bien...jeje.. aunque yo me acordaba de los años sesenta con esa estética y movimiento a lo juan y junior.
L.A. de música de fondo mientras cenábamos antes de ver a los lesbianos (que les tenía muchas ganas). En el SOS del año pasado no pude ni entrar casi al escenario de la peña que había y en el Low 2010 tampoco conseguí disfrutarlos bien... así que ésta tenía que ser la mía... me abría paso entre la gente como una hormiguita bien digna (oye... que me merecía verlos bien cerquita ya!) hasta quedarme a una altura bastante razonable y en un rinconcito con el suficiente espacio para poder moverme libremente... me quité el bolso y se lo di a alguien que tenía detrás (saltar con bolso es de lo más incómodo) y me entregué por completo a mi amor lesbiano (tanto que ni siquiera me di cuenta de que intentaron ligar conmigo hasta que después me lo dijeron los colegas)
Temazo tras temazo fui meneándome, retorciéndome, aplaudiendo, desgañitándome y brincando como no creía que fuera a hacerlo. Ellos estuvieron geniales: menos show que otras veces, pero buen sonido y buen sudor... y, aunque se dejaron temas como el amante guisante (para pena de muchas guisantillas disfrazadas) y mi querido segundo asalto (que me evitó la llantina descontrolada entre la multitud), yo me quité la espinita y floté entre miaus y plantas y gritos y john boys y malas lenguas... y me sentí toda yo un incendio de nieve incontenible que piensa en lo guay que sería que esa noche pudiera ser reversible (porque me sentó de miedo).
Para cerrar, dado que a Dorian los tengo más vistos que el tebeo... Klaxons (aunque la verdad... a mí ya no me quedaba mucha energía...)