Los martes empiezan por m
Cuando era pequeña (y no tanto), M. utilizaba las tiritas para taparse el ombligo porque no le gustaba verlo al mirarse al espejo.
Ahora las lleva siempre en el bolso por si tiene que taparle la boca a un chico 'cucurucho'.
Los chicos cucurucho son esos que... será por nervios o miedo o estupidez, se ponen a hablar y no paran.
Es como cuando das cuerda a un joyero y la música se acelera más de la cuenta.
Entonces M. empieza el ataque: desliza su mano en el bolso y busca la tirita, la saca y la va desembalando con una sola mano tras su espalda mientras acorta distancias.
Y acorta hasta que sólo 5cm separan su nariz de la del tipo en cuestión.
Entonces, lo mira a los ojos en modo parabrisas.
Cuenta hasta un número impar (da igual cual, siempre que sea superior a 3)... y le pone la tirita como quien pone bandera al tocar cima.
O eso haría... si no fuera porque los chicos cucurucho suelen aturullarse en las distancias cortas y eso... a veces resulta tan irresistible que... acaba besándolos.
Comentarios
Darío: no tientes a la suerte... no sea que acabes entre unos labios que no te dejen escapar :-P
hiro: sí, existen... pero aviso que chica cucurucha+chic@ cucuruch@... no suele ser buena combinación (lo digo por experiencia)... es como mirar al cielo y esperar a que lluevan ranas :P
hay que ver lo que cambia un par de vocales...
oye..como dirían en el pueblo de mi abuela...y tu de quien eres?? :-P