Hormigas y claveles
Las hormigas se van. Y Sarah Mclachlan es triste.
éstas son verdades universales.
hay tan pocas.
la mayoría no confesables.
como que te miro desde la barrera.
salté. y tú no. y no lo tenía previsto.
como cuando te cortas con el filo de una página.
no te mueres. casi ni sangras. pero algo se te congela.
puede que el ombligo... o las pupilas.
y durante un tiempo... tocas el papel con cuidado.
con la lengua entre los dientes y el reloj a medio gas.
presencias de recuerdos.
martillo. amenaza.
y luego se te olvida.
pero ahora (todavía) no.
y 'ahora' llena toda la habitación.
Comentarios
debería haber por lo menos cuatro... como las patas de una (buena) mesa... ^^
sniff :(