Entre tu boca y la mía
Y hay gente que no lo entiende.que me anima a 'salir del armario'.
Y no saben que yo salí de ese armario con 3 años. Ella era de rizos morenos y boca de sangre.me quitaba los pañuelos de tela que mi madre me guardaba planchaditos en el bolsillo y yo la perseguía y le gritaba. Y le pegaba. Pero ella se reía. Y así un día y otro. Hasta que yo me enfadé tanto que una vez en lugar de un puñetazo le di un beso. En la boca. Se quedó sin respiración.quieta en mitad de la clase durante varios minutos.yo recuperé mi pañuelo.
Y ella no volvió a hacerme rabiar nunca más.
Aprendí que los besos son poderosos.
Y que yo puedo dárselos a quien quiera y por el motivo que me parezca oportuno.sin importar si es hombre o mujer ni si l@s demás lo entienden.
Y nadie tiene derecho a meterse entre nuestras bocas.
Comentarios
desorden: los besos pueden resolver guerras... olé yo! ;)