Hay un bolígrafo que me hace feliz. Me gusta su aspecto, cómo escribe, cómo me queda. Hoy he comprado por internet 12 bolígrafos como ése. Las hormonas me han jugado una mala pasada. Lo sabía desde las 9:36, pero. Odio no poder ser vegetariana y ser tan estúpida de negarme a aceptarlo. Es una resistencia inútil y dolorosa. De pequeña casi me quedé sorda. Durante unos meses sólo me podía comunicar con la gente leyéndole los labios. Si no me miraban, el mundo estaba en silencio. Ahora oigo mucho. y muy bien. y a veces el mundo también está en silencio. Hanna. Hanna. Hanna. La quiero y la odio. y ni siquiera sé por qué (ni lo uno ni lo otro) Me gusta volver a casa de noche con las ventanillas bajadas: huele a tierra y a metal. Cuando tengo miedo los dedos de las manos me huelen a llavero y el pelo se me encrespa. Esta semana de repente iba a volver a estudiar. Pero los plazos acabaron. es frustrante. Me ha costado meses verlo claro. Y cuando llega la luz: portes tancades! Deberí...
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