Cuando el sol se acuesta...
Como tú no me quieres he decidido matar caracoles con autorización expresa de mi abogado ya no voy en autobús porque la gente se asusta al verme llorar y yo no puedo decirles por qué mi destino no es otro que dar cuerda a viejos relojes que sólo marcan la hora que quiero una vez al día mi destino es cerrar los ojos para ganar que no tengo plato ni premio casi ni me atrevo a respirar tramposa me subo a los árboles para gritar...