nalda: recuerdo la primera vez que tomé chocolate con jengibre en francia... me sentía perdida, hueca de huesos, con frío y la lágrima al borde del ojo... con ganas de que me abrazara el mundo entero... era un momento difícil... pero me sentía viva... sentía que me movía... y eso es importante... (las segundas oportunidades tienen muy mala fama... pero a veces son como una buena caipirinha... eso sí... absténgase gente a la que le gusta abrir puertas para entrar en sitios donde no se quiere quedar) desorden: qué dices??... con las bandas multicolor y ese azulón... vamos... super molón! :P besitos verdes,
A mí me gustan las segundas oportunidades, aunque nunca se me dieron bien. De hecho, a la mayoría de la gente se les da mal eso de recobrar un camino interrumpido.
alex: para dar(/se) una segunda oportunidad hay que abandonar el orgullo y mirar a los miedos de frente... y hay pocas personas que se atrevan a arriesgar.. (y no digo que no lo entienda...pero creo que la gente se acaba perdiendo demasiadas cosas) besitos nublados,
#1: casa... (pero yo creo que una casa no la sientes como tuya hasta que no estrenas...)
#2: orgasmo en tu nueva cama (de tu nueva casa): ooohhh!
y como de estrenar va la cosa...
#3: cheese cupcake en Las Manolitas (que ya están de vuelta): ñammm
#4: chaparrón con sandalias y rizos calados hasta escurrir
#5: (re-estreno) con Joan Antoni Melé... y mañana...
#6: beginners
*
*en realidad ha sido algo más que eso... ha sido un día Perfecto (lo haya dicho o no el hombre del tiempo)
Dicen que desde la roca más alta del monte Ulía se avisaba a los pescadores de avistamientos de ballenas. Resulta que los tipos de mariquitas se cuentan por puntos. Tengo un morado en el brazo porque lOs enfermerOs tienen que saber más que nadie. sobre todo más que tú. Llevo un par de semanas con el cuerpo contracturado. ni pomadas ni pastillas. creo que mi cuerpo está cabreado. no me deja mirar a la derecha. Antes cuando algo era duro o agrio o pesado, escribía. No sé muy bien cómo. Sólo me sentaba y por el bolígrafo iba saliendo lo malo y me dejaba muy limpia. con el contador a cero. Ahora ya no. Se me han caducado las palabras o algo y ya no sé ordenarlas. Ahora canto a voz en grito y se me calla la cabeza. bien. Otras, escucho a Ricardo y me siento bastante balsa. bien también. A. dijo que no seríamos amigos, desapareció. Había dicho que nunca lo haría. Pero eso ya lo he oído yo antes. Y el después lo he vivido también, igual por eso en vez de herida hay vacío. Se borró. Pero...
Ya tengo 34. El último año ha valido por 4. Ha habido tormentas (algún diluvio universal) y sábanas limpias sobre las que tumbarse a descansar. He aprendido a estar sola. a disfrutarlo con alegría. También a abrir los brazos para que vengan l@s demás (bueno, esto aún está en perfeccionamiento) Me he quitado callos, miedos, traumas y mochilas. He aceptado que no puedes obligar a la gente a quererte (ni a ser mejores personas) He aprendido a aceptar palabras bonitas. a no matarlas. También he llorado mi cuerpo. y todas las heridas. Y me he dado cuenta de que I. tiene razón: soy una tía muy sensorial. Y lejos de etiquetarlo como desventaja, he decidido explorar ese terreno: abandonando corsés racionales y dejando sitio a la intuición. dando poder a la pantera. Aún no sé lo que quiero ser de mayor. Ya lo descubriré por el camino. Me espera un año de exploradora muy interesante. .
Comentarios
Muak muak muakz
(las segundas oportunidades tienen muy mala fama... pero a veces son como una buena caipirinha... eso sí... absténgase gente a la que le gusta abrir puertas para entrar en sitios donde no se quiere quedar)
desorden: qué dices??... con las bandas multicolor y ese azulón... vamos... super molón! :P
besitos verdes,
besitos nublados,